Pie Diabético: ¡Ojo con las quemaduras en la playa!
Las neuropatías diabéticas son el conjunto de trastornos nerviosos causados por la diabetes. El 13,8% de los españoles, mayores de 18 años, tiene diabetes del tipo 2 lo que equivale a más de 5,3 millones de personas. Es muy común que, con el paso de los años, las personas que padecen diabetes puedan ver dañados parte de los nervios de su cuerpo y, mientras que algunos no presentan síntomas, otros pueden ser el dolor, el hormigueo, el adormecimiento o la pérdida de sensación en las manos, brazos, piernas y pies.
En nuestro post de hoy, nos vamos a centrar en los pies ya que los diabéticos suelen perder la sensibilidad en esta parte del cuerpo y, precisamente en esta época estival del año en la que nos encontramos, es importante tenerlo en cuenta para evitar quemaduras en las zonas de playa.
¿Por qué los diabéticos padecen la pérdida de sensibilidad en los pies?
Los diabéticos pierden la sensibilidad en los pies porque la hiperglucemia mantenida provoca una serie de cambios metabólicos y procesos oxidativos e inflamatorios crónicos en los tejidos que deterioran, entre muchas otras, la sustancia que recubre los nervios, llamada mielina, lo que impide la correcta conducción de los estímulos a través de las fibras nerviosas, provocando la pérdida de la función sensitiva y propioceptiva. Los huesos de los pies tienden a “descolocarse” modificando sustancialmente la forma en que apoyamos sobre el suelo, generando puntos de apoyo anómalos y deformaciones progresivas en el pie.
Si a este proceso neuropático sumamos una menor irrigación sanguínea de los pies, la falta de hidratación de esta parte del organismo y la presión que ejerce todo el cuerpo sobre ellos, en muchos casos, pueden originar úlceras que es lo que conocemos como pie diabético. Uno de los grandes problemas es que, como el paciente pierde la sensibilidad en esta extremidad, no suele advertir la aparición de úlceras e infecciones por lo que es importante cuidar los pies para no terminar con un miembro amputado. Precisamente, una de las causas más frecuentes de amputaciones no traumáticas es la diabetes.
De ahí, la importancia de revisar los pies continuamente. Para ello, es aconsejable hacerlo con buena luz, ya sea natural o artificial, y utilizando un espejo que nos permita visualizar aquellas zonas a las que por nuestra falta de elasticidad nos sea imposible acceder. Si advertimos alguna herida, es preciso que sea evaluada por el médico inmediatamente.
¿Qué problemas puede ocasionar la pérdida de sensibilidad en los pies?
Tanto el frío como el calor extremos pueden provocar en nuestros pies heridas de extrema gravedad que pueden conllevar incluso la amputación de alguno de nuestros dedos o del pie entero. Por ello, es muy importante, sobre todo en verano, tengamos especial cuidado con las altas temperaturas en espacios preferentemente calurosos. Nos referimos, por ejemplo, a la arena de la playa que sobretodo en las horas de más calor puede alcanzar temperaturas extremas que no son perceptibles para el paciente diabético con neuropatía. En el caso de los pacientes diabéticos, es muy recomendable no caminar descalzo por la arena en horas de intenso sol, hacerlo siempre acompañado de alguna persona que no padezca diabetes y mantener los pies bien refrigerados con el agua del mar.
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